Mi nombre es tan común qué podría ser el de cualquier
persona en este mundo sin embargo es el mío la mayor parte de latinoamérica se
llama José otros se llaman Antonio y algunos más se llaman José Antonio pero mi
nombre no tiene nada que ver con la Biblia ni con ningún la historia de Santos
o demonios sino que son los nombres de mis abuelos José por José de la Cuadra,
mi abuelo materno y Antonio por Antonio Núñez del Arco González, mi abuelo
paterno. Mis padres me tuvieron a una avanzada edad según el doctor se le
recomendó a mi madre que se deshiciera de mí ella me contó que el galeno Le
entregó unas pastillas abortivas a mi padre y mi progenitor quiso que mi madre
las tomara ella decidida a que yo podría ser un milagro en su vida botó las
pastillas a la calle y se negó a tomarse las No sabría el estrés y las
preocupaciones que vendrían a continuación....