Se te acabó el cuento de hadas, Cenicienta
La media noche llegó, y no quisiste ver tu carruaje en calabaza.
Corriste tan rápido que no pudieron alcanzarte
Los ratones que dejaste solitarios, extrañándote.
Se te acabó el cuento de hadas, Cenicienta.
Trasnochada, hiciste magia para no dejar de ver las estrellas
En un cielo abierto, siempre nocturno, siempre constelado
Pintaste acuarelas rojas con el néctar de tu vida.
Cenicienta trasnochada ¿quién tuvo la culpa?
De que no quisieras envejecer otro día ¿quién?
Ya no habrá otro amanecer, al sol lo has cortado en dos
Y te has escapado en tu media noche eterna.
Te quedaste encerrada en un sueño de palabras
Te hartaste del corsé y del largo vestido
de la tiara, del vals y del principe que ya no llegó
El zapato de cristal ha quebrado su tacón
Y ha dejado trozos rotos por todo el piso
Se te acabó el cuento de hadas, Cenicienta
Y a nosotros ¿Quién...? ¿Quién nos contará otro cuento?
Si el Hada Madrina ha volado ya, llevándote a tí entre sus alas de plata...
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